Cabruta

Parroquia del municipio Las Mercedes en el estado Guárico. De origen indígena. Se halla en la ribera N del río Orinoco, al E de la boca del Apurito y a unos 60 m de altitud. Su temperatura es de 27 °C y la precipitación media aproximada, de 1.400 mm. Toda esta región estuvo densamente poblada en tiempos precolombinos; a la llegada de los españoles era aldea indígena llamada Cabritu por Diego de Ordaz en 1531. En la Relación de Martín López del 27 de octubre de 1556, se llama Caburute y era poblada de indios aruacas que tenían trato con todos los demás indígenas de la zona excepto con los caribes.

En 1624, según fray Pedro Simón, era paso de río. El entonces gobernador de la provincia de Guayana, Diego López de Escobar, propuso en 1639 construir un fortín en ese sitio, pero sería Martín de Mendoza y Berrío, su sucesor, quien en 1643 envió a Juan de Ochoa Gresala y Aguirre a fundar el puerto y ciudad de Triunfo de la Cruz y Nueva Cantabria, como parte de su plan para fortificar el Orinoco; lo acompañó el cacique Maguare, quien residía allí en 1647 cuando arribó la expedición de Miguel de Ochogavia y Jacinto de Carvajal, procedentes del río Apure.

Al año siguiente, Mendoza mudó el fortín al sitio de Pilotillo. A partir de 1658, la capital de la provincia de Guayana fue la ciudad de San José de Oruña, en Trinidad y Cabruta quedó despoblada. En diciembre de 1720, el gobernador de la provincia de Venezuela, Marcos de Castro, organizó una fracasada expedición en busca de El Dorado, en la que viajaban unos misioneros capuchinos; 2 de éstos, fray Bartolomé de San Miguel y fray Salvador de Cádiz, al llegar a Cabruta acordaron, con grupos indígenas guaiqueríes y mapoyas, salir de allí para poblarse en la mesa de Calabozo. En 1722, una real cédula de 8 de junio, aprobó la propuesta de los capuchinos andaluces de fundar varios pueblos y villas a orillas del Orinoco, uno de los cuales estaría en Cabruta, pero fue el jesuita Bernardo Rotella quien estuvo en el sitio entre 1733 y 1734; de esta fecha databan las partidas de bautismo más antiguas que en 1765 vería el obispo Mariano Martí.

En 1738 objetaron la intromisión jesuita en su jurisdicción y para 1740 la fundación de San Ignacio y Nuestra Señora del Socorro de Cabruta, por Rotella, los hace acudir a la corte. El proyecto jesuita era crear una misión mixta de indios y españoles, iniciando un foco de atracción poblacional hacia el Orinoco; Cabruta sería el centro de comunicaciones de esa parte del país, entre Guayana y Caracas y entre el Atlántico y el alto Orinoco. Sus primeros habitantes fueron indios guamos huidos de las Misiones capuchinas, cabres del Orinoco y algunos españoles, mulatos y Mestizos. Era realmente un lugar estratégico, sitio de parada _uvial y terrestre. La situación se hizo más complicada cuando el gobernador de Nueva Andalucía autorizó a Miguel Angel de Córdoba, quien acompañaba a Rotella, a fundar una villa de españoles con el nombre de Nuestra Señora de la Concepción y los capuchinos consiguieron que ese proyecto fuera anulado mediante real cédula del 5 de febrero de 1741 y el 14 del mismo mes, el Consejo de Indias dictaminó que la ribera N del Orinoco estaba dentro de la jurisdicción de los capuchinos, declarando al mismo tiempo como infractores a los jesuitas. Sin embargo, esta congregación no abandonó Cabruta, sino que la convirtió en centro de acción misional, indispensable para controlar las incursiones caribes hacia el alto Orinoco y permitiéndoles a los misioneros la penetración de Guayana.

Además, dependía del obispado de Puerto Rico, a pesar de estar situada en terrenos de la provincia de Caracas; Rotella moriría allí en 1748. En septiembre de 1751 Juan Francisco de León pasó un tiempo en Cabruta, mientras era perseguido a raíz de los alzamientos protagonizados por los canarios. En 1754 tenía 400 indios y 40 españoles. Entre 1756 y 1760 fue sede de la Expedición de Límites que debía trazar la frontera con Brasil y efectuar prospecciones y exploraciones naturalistas, al mando de José de Iturriaga, José Solano y Bote y con Ignacio Madariaga. Desde allí partieron las expediciones hacia los llanos, Guayana, alto Orinoco y Esequibo. En 1758 José Solano propuso, sin éxito, que dada la importancia estratégica de Cabruta se creara una gobernación especial para esa región con capital en esa ciudad. El 29 de diciembre de 1765 fue visitada por primera vez por el obispo Mariano Martí. En una relación anónima de San Sebastián, antes de 1767, se dice que tenía 120 familias de indios aproximadamente y 20 o 25 hombres de armas para defenderse de los caribes. En 1767 tuvo lugar la expulsión de los jesuitas de los dominios españoles y Cabruta fue entregada interinamente por el obispo de Caracas a los capuchinos, quedando al frente de ella fray Damián de Jerez, hasta su muerte en 1772 cuando lo sucedió fray Alfonso de Marchena; en 1774 fue entregado al ordinal. Entre estos años fue sede de la misión capuchina.

En 1768 pasó del obispado de Puerto Rico al de Caracas. En esa época era importante puerto de intercambio en la ruta Angostura-Barinas; de Cabruta salían huevos de tortuga, ganado y cueros y a través de ella se distribuían al interior todo tipo de mercancías. Cuando el obispo Martí la visitó por segunda vez, el 29 de febrero de 1780, la encontró despoblada; los indios de nación atapaimas, se habían ido a otras poblaciones y sólo quedaban unos pocos soldados y habitantes. Se encontraba allí por orden del gobernador de Caracas, el teniente Juan José de Rojas Queipo con la misión de refundar el pueblo, dada su importancia como único pueblo de la provincia a orillas del río Orinoco. Tenía cura interino y la iglesia seguía aún bajo la advocación de San Ignacio; producía algodón, maíz, pescado, plátano y yuca y había hatos de ganado. A petición de los vecinos fue erigido en parroquia por autorización de Martí el 5 de septiembre de 1781.

A raíz de los sucesos de 1810, Cabruta fue incendiada por las tropas realistas de Matías Farreras; los patriotas destacaron entonces una pequeña tropa en previsión de otro ataque desde Guayana, el cual se produjo el 6 de diciembre de 1811, por las fuerzas de Angostura que derrotaron al comandante patriota Francisco González Moreno. En enero de 1814 el ejército de oriente tuvo varios encuentros exitosos contra los realistas, uno de ellos en Cabruta. En 1832 fue elevada a la categoría de parroquia. En junio de 1857 pasó por el puerto el viajero y fotógrafo húngaro Pál Rosti, quien encontró la población sumida en el abandono; el vapor mensual que hacía la ruta del Orinoco, no paraba allí sino en Caicara, por lo que había que hacer trasbordo de pasajeros y mercancía en este puerto. En 1891 tenía 44 casas y 250 h. La economía actual es básicamente agropecuaria, principalmente ganado vacuno, algodón y leguminosas. La faja petrolífera del Orinoco es un factor de desarrollo potencial. Es un puerto fluvial subutilizado. Tiene escuelas de primera enseñanza, ciclo básico, hospital. Se pueden visitar los petroglifos, el parque nacional Aguaro-Guariquito, playas fluviales. Hay aeropuerto en Caicara y se comunica por gabarras y por vía terrestre con Las Mercedes (192 km). En 1961, tenía 826 h, 1.927 en 1971, 3.985 en 1981 y 4.335 en 1990. A.G.C.

HEMEROGRAFÍA: PINTO C., MANUEL. «Cabruta del Orinoco». EN: Boletín de la Academia Nacional de la Historia. Caracas, núm. 169, enero-marzo, 1960

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